Teléfono RojoEliseo Tejeda Olmos
Revisando quienes se han sumado a mis amistades en Facebook, me encontré este sábado un mensaje, más bien un recordatorio de mi amigo Guillermo Manzano sobre la tragedia de la guardería ABC en Sonora, donde murieron pequeños inocentes víctimas de la irresponsabilidad y después de la impunidad con que actuaron autoridades federales y estatales que no han encontrado hasta ahora culpable alguno.
Son 156 días, apunta Memo. Más de medio año de dolor para los padres y madres de familia que confiaron lo más valioso que tenían, su motivo para vivir y trabajar, en un lugar que se convirtió en horrible fin para los pequeñitos y pequeñitas.
Aunque menos, pero todavía se escuchan los lamentos y exigencia de justicia de algunas madres que perdieron a sus hijos, pero lamentablemente quienes deberían atenderlas no lo hacen. Ni el Gobierno Federal ni el Estatal. Aún con un nuevo Gobernador en Sonora, aparentemente la justicia para los agraviados no forma parte de la agenda política.
Nada será suficiente consuelo para quienes hace 156 días estando en sus lugares de trabajo se enteraron del incendio en la guardería ABC y trataron de llegar lo más pronto posible para encontrar a sus hijos y rescatarlos, pero la justicia podría al menos aplicarse a quien o quienes son responsables, directa o indirectamente de la tragedia.
Vergüenza ajena da porque los políticos, esos que aprueban sin recato y por intercambio de canonjías nuevos impuestos para todos, siguen en la misma tesitura: echándose la bolita unos a otros mientras que la impunidad protege a quienes deberían estar en la cárcel.
¿Cuándo los ciudadanos despertarán de su letargo? En lugar de exigir y lamentarse cuando las cosas han sucedido, deberíamos estar atentos a quienes buscan por simples ansias egoístas tener una parte de poder político, que quieren ser alcaldes, diputados locales o hasta gobernador, por ejemplo, el próximo 4 de julio del 2010.
Este es el mes de noviembre, de los fieles difuntos, faltan dos o tres meses para que los ansiosos comiencen su egoísta búsqueda de una Presidencia Municipal, una diputación local y una gubernatura en Veracruz. ¿Cuántos de ellos aprueban un examen de humildad, honestidad y verdadera preocupación por los demás?
De acuerdo al listado nominal de electores, más de cuatro millones de personas en la entidad tienen la palabra, de esa cantidad ¿cuántos la harán valer?
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