domingo, 17 de febrero de 2013

La protección a los periodistas

Teléfono Rojo
Eliseo Tejeda Olmos

Después que la ola de violencia alcanzó a los periodistas veracruzanos y llamó la atención hasta el ámbito internacional con el asesinato de la compañera Regina Martínez Pérez, surgió la intención de crear un organismo autónomo que se encargara de atender y proteger a los trabajadores de la información de atentados y amenazas.
Los primeros trabajos fueron vistos con esperanza pues en ellos se incluyó a un periodista crítico y en activo: Jorge Morales Vázquez, quien fue el enlace para que periodistas de todo el estado acudieran a las reuniones convocadas por la doctora Namiko Matzumoto a quien en ese tiempo nadie, fuera del renglón de los derechos humanos, conocía.
Desde que era un grupo técnico que buscaba conocer la realidad que cotidianamente afrontan los periodistas, la Comisión en ciernes provocaba recelo en el gremio y que después, cuando se dio a conocer quienes la iban a integrar se convirtió en desconfianza, pues por decreto dos de sus comisionados son propietarios de medios de comunicación que, es penoso decirlo pero es verdad, tienen la visión patronal que paga bajos sueldos a sus trabajadores y mantienen a muchos sin las prestaciones que marca la ley del trabajo.
Pero viendo las cosas en positivo, los periodistas nos mantuvimos a la expectativa, otorgando el beneficio de la duda que ahora claman voceros oficiosos ante el escándalo provocado por la manera en que se aplica el presupuesto aprobado por el Congreso local a la Comisión Estatal de Atención para la Protección de los Periodistas.
La mínima esperanza de contar con un organismo de atención y protección para los trabajadores de la información ha desaparecido después de enterarnos, gracias a un acto de honestidad y a favor de la transparencia ejercido por el comisionado Jorge Morales Vázquez, quien informó primero a un grupo de periodistas y después en entrevista a diferentes medios de comunicación, que la mayor parte de los 15 millones de pesos de presupuesto anual, se dedicarán al pago de sueldos de una plantilla de 38 empleados.
Sin que hasta el momento en la página web de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas se informe de los nombres y salario asignado a cada uno de esos empleados, cabe apuntar que la secretaria ejecutiva cuenta a su vez con el apoyo de tres secretarias: una general, otra ejecutiva y una particular.
El salario asignado a la doctora Matzumoto es de 59 mil 531 pesos con 13 centavos que significan un mil 984 pesos con 37 centavos al día, remuneración que muchos periodistas reciben ¡pero en un mes! Ese salario es el mismo que percibe un secretario de despacho del Gobierno del Estado pero su atención y servicio están enfocados a toda la población y no solamente a un sector de la misma.
Las buenas intenciones nunca faltarán en las acciones de gobierno y en el caso de la creación de la Comisión Estatal de Atención y Protección de los Periodistas, hasta este momento en eso está quedando.
Un salario tan alto para quien lanzó un “exhorto” al comisionado Jorge Morales Vázquez por haber informado del manejo del presupuesto que “solamente es para consumo interno” va en contra totalmente de lo que establece el artículo 20 de la Comisión: promover entre la sociedad veracruzana el ejercicio de la libertad de expresión así como del derecho al acceso a la información, derecho que ejercen y exigen todos los días los periodistas veracruzanos.

Correo electrónico: telefonorojo2006@yahoo.com.mx

viernes, 8 de febrero de 2013

Las preocupaciones de los políticos

Teléfono Rojo
Eliseo Tejeda Olmos

Mientras que el ciudadano común y corriente anda preocupado por el salario o lo peor, conservar o hasta conseguir un trabajo, la manutención de la familia -sea casado o no- o la seguridad y la vialidad en la ciudad, los políticos a lo largo y ancho de Veracruz andan también preocupados, pero por lo suyo.
Buscan una posición edilicia en cualquiera de los 212 ayuntamientos veracruzanos, los más y una  menor cantidad la suplencia como candidato a diputado local, con eso de que ya se volvió costumbre de que no terminan el periodo para el cual fueron elegidos y ya andan buscando ser postulados para otro encargo público.
Así que el tema de cafés y corrillos es quienes podrán ser candidatos a alcaldes o diputados. Que si Américo Zúñiga, Ricardo Ahued, Carlos Rodríguez o David Velasco Chedraui; que si Miguel Ángel Yunes Márquez o su papá Yunes Linares y sobre todo, qué personajes estarán encargados de manejar por sus respectivos partidos el proceso electoral que ya comenzó.
Así que dejando fuera de comentario o análisis de lo que preocupa o quieren los ciudadanos, los políticos hablan y analizan la alianza del Partido Acción Nacional con el de la Revolución Democrática y el surgimiento de nuevos partidos como el Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional que de afianzarse electoralmente, será una carga más para los que pagarán su manutención por la vía de sus impuestos.
Son cincuenta lugares en la cámara local de diputados que los políticos, multiplicados al menos por tres, buscan afanosamente al ser postulados por cualquier partido político. En el caso de la renovación de los ayuntamientos, son más de un millar los que buscan una regiduría o alguna de las 212 sindicaturas.
En el caso de los que quieren ser alcaldes, el ciudadano se pregunta: ¿para qué quieren ser presidentes municipales si los ayuntamientos están endeudados hasta el tope y muchas veces los que se van no dejan ni siquiera para el pago de aguinaldos?
Porque hasta el más modesto, presupuestalmente hablando, de los municipios es peleado con dientes y uñas por quienes anhelan ser los presidentes de su pueblo.
Cómo quisiéramos todos que las preocupaciones de los políticos, esos que hoy luchan de todos los modos imaginables una candidatura a presidente municipal o a diputado, fueran las mismas que tienen los ciudadanos, porque de ser así, entonces los pueblos, ciudades y el estado tendrían, seguramente, un mejor futuro.

correo electrónico: telefonorojo2006@yahoo.com.mx